Las cifras oficiales revelaron ayer que el país estaría logrando frenar el porcentaje de desempleo que venía registrando un alza en los últimos meses. Según el INEC, hasta septiembre, la tasa nacional cerró con un 4,0 %, versus el 4,1 % registrado en igual mes del año pasado. Un indicador que estaría sosteniéndose con una aparente recuperación en la ciudad de Guayaquil y que hoy los analistas económicos no dejan de cuestionar.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), en el noveno mes del año, el Puerto Principal llegó a convertirse en la ciudad con la tasa más baja de desempleo del país al alcanzar un 3,4 %. Muy por debajo de lo que han alcanzado otras ciudades como Quito que cerró en 8,8 %, Cuenca (4,8 %) o Machala (6,9 %). El desempeño de Guayaquil en las cifras oficiales sorprenden a Byron Villacís, exdirector del INEC. Se trata, dice, de una de las tasas más bajas en la historia de la ciudad, y que se consigue en un contexto económico que a nivel nacional continúa en una etapa de recesión. “Habría que ver qué es lo que está generando esta recuperación que no está en concordancia con el resto de indicadores que hablan de la evolución de la dinámica de la economía del país: el PIB se desacelera, seguimos viendo un enfriamiento de la economía”.
Pero, según el INEC, no solo la tasa de desempleo mejora en esta ciudad. El subempleo también cayó de un 24,1 % a un 19,8 % y, lo que es mejor, el empleo de calidad o trabajo adecuado, creció de un 47,9 % a un 50,2 %.
Desde la Cámara de Comercio de Guayaquil (CCG) también han optado por cuestionar estos datos. Pablo Arosemena, presidente del gremio, menciona que aunque estas cifras sean estadísticamente significativas se deben tomar con cuidado. En el sector comercial aún, señala, no se tiende a ver mejoras. “La facturación y el IVA crecen cada vez menos, lo que indica que aún no existe recuperación. Lo más prudente es ver las cifras al final del año, que serán más representativas en la dinámica laboral del país”.
Ayer, las autoridades del Gobierno y del INEC se refirieron de forma en general a estos resultados que catalogaron como “estables”; es decir, sin una variación que esté a favor o en contra de este mercado. Una opinión que se enfrenta con la de algunos analistas económicos que consideran que una tasa de desempleo del 4 % habla más bien del estancamiento del mercado laboral para generar nuevas plazas de trabajo, sobre todo de calidad.
Alberto Acosta Burneo, editor de la revista Análisis Semanal, destaca la baja variación que en septiembre se registra sobre la generación de empleo adecuado a nivel nacional. Esta tasa, según el INEC fue de 40,4 % a 39,6 %, una caída que se define como una cifra estadísticamente no significativa. Lo mismo pasa con la tasa de informalidad que pasó de 46,4 % a 46,2 %.
“Lo que sí podemos concluir es que el mercado laboral sigue contraído, que no se logra recuperar después de la crisis del 2016. A septiembre de ese año, el país llegó a tener un nivel de empleo adecuado máximo y a partir de ahí ha venido cayendo”. Todo esto, dice, en medio de una economía que se desacelera, “que tiene algunos desequilibrios aún por corregirse, que tiene problemas de competitividad, un ajuste fiscal aún pendiente, que tiene a empresas reenfocando su productividad, luego de haber perdido al Estado como su mayor cliente”.
Por ello, coincide José Hidalgo, director de la Corporación de Estudios para el Desarrollo (Cordes), la mejoría que se observa en Guayaquil sigue siendo insuficiente para impulsar al empleo a nivel nacional.
El mercado laboral
Otras ciudades
El ajuste fiscal que afecta al sector público continúa incidiendo en la capital. Quito hoy es la ciudad con la mayor tasa de desempleo, con 8,8 %. Le sigue Machala con una tasa del 6,9 %, versus el 4,4 % que alcanzó el año pasado.
Agricultura
A nivel nacional se observa que este sector es el que mejor desempeño tuvo en la generación de empleo. La tasa pasó de un 26,82 % a un 29,3 %. Otros sectores como el comercio, construcción, manufactura reflejaron un estancamiento.
Informalidad
Según el INEC, hasta septiembre de este año, el empleo en este sector pasó de 46,4 % a un 46,2 %, una variación que no es estadísticamente significativa. El subempleo pasó de un 20,5 % a un 19,4 %.
Fuente: Expreso