Qué beneficio recibe el país al pertenecer a la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP). Esta pregunta se reformuló en 1995, en el gobierno del Arq. Sixto Duran Ballén y la respuesta que dieron los técnicos del Ministerio de Energía, luego de una evaluación fundamentada, fue que ninguno, y que, por el contrario, existían algunas circunstancias perjudiciales, entre las cuales figuraban las siguientes:
- Periódicamente el país había recibido mandatos de la OPEP, en el sentido de reducir temporalmente la producción de petróleo, lo cual afectaba el desarrollo de nuevos campos y creaba desfinanciamientos al presupuesto general del Estado.
- Las compañías privadas endurecían los términos de los contratos para explotar petróleo, en perjuicio del país, por lo que las decisiones de la OPEP eran una amenaza para el desarrollo de sus programas, incrementando así los riesgos operacionales.
- La cuota anual que se exige a los miembros de la OPEP, sobrepasa los USD 4 millones, la cual sirve para financiar una burocracia ineficiente y dispendiosa.
- Los volúmenes de exportación del Ecuador son absolutamente marginales en relación con el resto de miembros de esta organización, en especial los países árabes, cuyos jeques tienen siempre la última palabra en las decisiones que se adoptan.
- La OPEP no es una organización creada para establecer programas de financiamiento a sus miembros ni de transferencia de tecnología, por lo cual el país jamás se ha beneficiado de los mismos.
Fuente: El Comercio